La morocha (1958)

Melodrama en el que una prostituta se enamora de un joven estudiante de música de Buenos Aires. La película abusa del personaje de la prostituta de corazón de oro, capaz en este caso de robar, mentir y engañar sólo para ayudar a un estudiante de música. El personaje del tío avaro es despechado a la mitad de la película. Tita Merello (condenada a amores imposibles o conformistas en los films de la década de 1950) hace lo que puede, mientras Alfredo Alcón ya insinúa algo de lo que iba hacer como actor. La resolución es simple y casi bella.