Krimi en el que un asesino deja una maleta negra a sus víctimas antes de matarlas en Londres. Nueva versión de Das Geheimnis der schwarzen Koffer (1962). Franco juega al giallo en su propio terreno. Con un poco más de desprolijidad, aún más incoherencias y un humor un poco facilista vale decir. Pero se las arregla bastante bien para darle su toque personal al film. Nada importa, ni la identidad del asesino ni las vueltas de la trama. Sólo el despliegue visual de los travellings agresivos, los ángulos imposibles y los lentes deformados.