Comedia de terror en la que una familia dueña de una funeraria que está pasando por un mal momento empieza a “crear clientes” en un pueblo de New England en la década de 1890. El placer de ver a tres leyendas del género de terror (Vincent Price, Peter Lorre y Boris Karloff) se suma a una anticipación de la escena de la familia reunida en la mesa de The Texas Chainsaw Massacre (1974). Aunque la utilización de la cámara rápida y los chistes reiterativos dan a entender que Jacques Tourneur tuvo poca injerencia en el montaje final de la película.
