Comedia dramática en el que un grupo de damas inglesas se juntan regularmente a tomar el té en Firenze en la década de 1930. La visión tan acartonada como superficial de la época y los personajes hacen dudar de que Franco Zeffirelli haya vivido esos años en Italia. La película ni siquiera tiene el acto de valentía de decir “así lo viví yo”, sino que adopta todos los inofensivos clichés con que es visto el neorrealismo italiano cincuenta años después. Solamente se puede rescatar el reparto de excelentes actrices y las locaciones reales de Florencia, ciudad cuna del arte renacentista occidental.