Drama en el que un adolescente espía a una joven pareja en Taipei. Se pueden establecer paralelismos entre la ópera prima de Tsai Ming-liang y el cine de Wong Kar-wai y Martín Rejtman, aunque sin la refinamiento visual del primero y el sentido del humor absurdo del segundo. Mientras los personajes deambulan por la noche y las luces de neón de Taipei, hay tiempo para reparar en algunos objetos (la lluvia, el vidrio) que sirven de extrañamiento para eventos que se dan por hechos.