Mes séances de lutte (2013)

Drama en el que una joven mantiene unas “sesiones de lucha” con un vecino con el que se siente atraída en un pueblo de Francia. Doillon plantea otro juego extremo y peligroso entre el cine, el teatro, los cuerpos y los actores. El hecho de que los propios personajes ya desde el principio lo planteen como un juego no le quita menos impacto y validez a la propuesta. El film se aleja del tono alarmista y provocativo de las historias de amor sadomasoquistas, pero al mismo tiempo se acerca a un tono de violencia pocas veces visto en un film. Los cuerpos asumen las posturas más extremas y rebuscadas.