Comedia dramática en el que un hombre común reclama que Howard Hughes lo incluyó en su testamento después de que le diera un aventón en medio del desierto camino a Las Vegas. A partir de un supuesto caso real, Demme hace un genial retrato del americano medio. Porque deja de lado las obviedades y las suposiciones y va directo a analizar el comportamiento y las acciones de sus personajes sin juzgarlos en ningún momento. La resolución deja la puerta abierta a las dos grandes posibilidades porque lo mejor ya pasó: el retrato de un personaje que carece de malas intensiones pero está resignado y las relaciones con las mujeres de su vida.