Comedia romántica en la que un desafortunado entrenador de perros conoce a una neurótica cantante de ópera en Los Angeles. Cuando el film parece que va a desarrollar la relación de la pareja protagonista, siempre surgen otros conflictos. Todo queda en la nada. Es una lástima que Ellen Barkin esté tan contenida. La presencia de un asesino serial en el vecindario y el estreno de un film de terror son momentos al menos curiosos.