La vida nueva (2011)

Drama en el que un veterinario es testigo del acuchillamiento de un adolescente en un pueblo de la provincia de Buenos Aires. Pablo Trapero le produce el film a Santiago Palavecino, le presta su actriz y compañera, pero la película no termina de levantar nunca. Ya sea porque la trama del crimen carece de resonancia (policial, social o genérica) o porque la historia de la pareja en crisis está tratada con una excesiva distancia y frialdad. La elección del escritor Alan Pauls como protagonista es arriesgada, pero al menos discutible.