Flirt (1995)

Comedia dramática en que la misma situación, un amante antes de comprometerse debe aclarar su futuro con su otra pareja, se repite en tres historias diferentes en New York, Berlin y Tokio. Parece que los personajes y las historias de Hartley viven en un universo aparte. Quien los conoce los aprecia. De ahí que el drama y la tragedia sean siempre relativas. Que el discurso sobre la globalización y la posmodernidad no venga cargado de moralina añeja y los antojosos azares de Kieslowski ya es un aliciente.