Comedia dramática en el que un grupo de escritores intercambian parejas en Paris. La preocupación de Olivier Assayas por el audiovisual ahora llega al mundo de las letras. Las editoras no saben qué hacer con internet, los blogs, los audiolibros o la imprenta misma. Y las ramificaciones del tema pueden salir para cualquier parte, pero sobre todo a las parejas laborales de un grupo de colegas, amigos, artistas, escritores, empresarios, amantes. A nivel de la imagen lo digital (numérique) también hace meya: las tres salidas del frío ambiente urbano son una conversación entre hombres de negocios, unos paseos por el bosque que remiten a L’avenir (2016) y siempre hay algo que se pierde en el camino. Por eso la fotografía digital choca. A nivel de la escritura Assayas viene perfeccionando la inclusión del chiste, cosas de la madurez tal vez. Sobre la relación de un meme de Star Wars con la negación a no compartirlo en el grupo porque requeriría muchas explicaciones sobran las palabras. Juliette Binoche la pasa bomba, gran comediante y actriz. Christa Théret siempre a la expectativa, y Nora Hamzawi bien francesa, no abandona la pose hasta la confesión de la nada, amor al borde del quiebre de la voz. La referencia puntual a la fe de Bergman (1963) es el guiño que permite mantener la herencia del melodrama. En fin, una película de Assayas más clásica: los triángulos de Renoir, cierta disposición Eric Rohmer de los diálogos, los juegos de Alain Resnais. Non-fiction, el título de distribución internacional.
