Cuento de ciencia ficción en el que un hombre con amnesia es sospechoso de unos asesinatos en una ciudad oscura gobernada secretamente por unos extraterrestres. El drama existencial y el policial con aire de film noir se combinan explícitamente con las coordenadas de la ciencia ficción. La oscuridad del diseño visual del film se hace dueña de la función. La descripción de una ciudad neogótica y atemporal actualiza la sensación de pesadilla expresionista. La belleza de las imágenes es indiscutible, pero por momentos sacrifica la fluidez de la historia. La trama está un poco cargada (un asesino de prostitutas, un detective que investiga el caso, un científico que ayuda a los extraterrestres y una esposa que busca a su marido desaparecido) y ciertos pasajes tienden a la confusión, pero el film deviene un fascinante viaje en búsqueda de la identidad y la memoria. Los extraterrestres se hacen llamar extraños, son una raza superior en decadencia que opera en el mundo subterráneo, tienen poderes mentales y hacen experimentos con la arquitectura de la ciudad. El gran momento se da cuando los protagonistas rompen la pared que marca el límite de la ciudad y se encuentran con el espacio exterior. La única falla son algunos excesos de pirotecnia en las irrelevantes secuencias de acción.
