Charisma (1999)

Mezcla de drama existencial y fábula fantástica en la que un policía suspendido por un mal proceder se va al bosque a cuidar de un misterioso árbol en Japón. A partir de un argumento tan simple como abstracto, Kurosawa logra plantear preguntas trascendentales sobre la intervención del hombre en la naturaleza. A al mismo tiempo que da una pequeña lección de cine sobre cómo filmar las escenas de acción y violencia. El minimalismo y la austeridad resulta mucho más impactante, “cool” y original que John Woo o Quentin Tarantino. La resolución con la imagen apocalíptica de la ciudad y el bosque en llamas recuerda al mejor Lucio Fulci.