Tercera parte de The Evil Dead (1981) en la que Ash es transportado a la edad media y debe buscar el libro de los muertos para regrresar al presente de dónde fue sustraido. El tono que se impone es el de un film de aventuras. El humor de este capítulo es mucho más camp. De hecho parece mentira que la trilogía en sus inicios fuera una película de terror. La intención de Raimi es visualizar la batalla entre humanos y cadáveres como estuviera hecha con los efectos especiales de Ray Harryhausen. Agrega eso sí datos sobre el pasado de Ash, una historia de amor y un villano que se sale del cuerpo.