Documental sobre el diario de viaje de Wim Wenders en Tokyo en búsqueda de las imágenes del cine de Yasujiro Ozu. El film funciona a la vez como un retrato revelador sobre los métodos de Ozu (en cuanto al trabajo con los actores y la cámara) y como un serio cuestionamiento a la actual incapacidad para encontrar imágenes significativas. En la sala de videojuegos o en un estadio de golf Wenders está convencido que no las va a encontrar. Aunque en las escenas de Chishû Ryû visitando la tumba de Ozu y de Yûharu Atsuta recordando emocionado haya mucha emoción, tal vez el problema del cine contemporáneo esté en los individuos y los espectadores.