Comedia romántica en la que un repartidor de diarios hipocondriaco conoce una chica en Estocolmo. Mientras sigue felizmente la neurosis de su protagonista, Hallström da sobradas muestras de mediocridad en su ópera prima: unos primeros planos indignos del país de Ingmar Bergman, la condescendencia abismal hacia los personajes, no hay conflicto que un rápido movie montage no pueda solucionar y la despreocupada vocación turística del segmento en Túnez.