Biopic del periodista francés Jean-Dominique Bauby durante la escritura de sus memorias recluido en una cama de hospital con una parálisis casi total del cuerpo a mediados de la década de 1990. Schnabel toma un material delicado y lo convierte en un modesto experimento visual. Los primeros treinta minutos de la película tienen una cámara en primera persona. Después los fueras de foco, la imagen cristalina, los extraños desplazamientos y los ángulos imposibles crean los dos refugios que utiliza el protagonista, la memoria y la imaginación. Pero precisamente allí sus pensamientos merecían un tratamiento más arriesgado. Los arreglos formales solos no logran entrar al corazón de la historia y el personaje. El film es más una idea que un concepto llevada hasta el final.