Cuento de ciencia ficción en el que un monstruo reptil gigante ataca New York. Remake de Gojira (1954). El film tiene una asombrosa facilidad para convertir a todos los personajes (el científico que hace deducciones, la aspirante a periodista ambiciosa, el camarógrafo arriesgado, el agente francés que odia el café americano, el alcalde que busca la reelección, los militares con ansías de fuego) en meras caricaturas. Lo mejor es la ambientación de una New York oscura y lluviosa con la fotografía en tonos azules de Ueli Steiger. El majestuoso despliegue de helicópteros, barcos, aviones y submarinos en vertiente catastrófica parece heredado de Independence Day (1996). La intervención de los militares de la resolución recuerda al cine de ciencia ficción de la década de 1950. El epílogo deja la puerta abierta para la secuela.
