Drama en el que tres asistentes sociales van a un barrio carenciado de un pueblo de Santa Fe. A partir de un esquema cercano al documental, de las entrevistas espontáneas y de una distancia respetuosa, Fund y Loza cuidadosamente evitan el miserabilismo, la condescendencia y la bajada de línea. Sólo en el final hay una fuga afectiva y un poco de poesía en el barro. Pero, para ese entonces, el film ya acusa la frialdad de la calculada puesta en escena.