Giallo en el que unas estudiantes que comparten un secreto empiezan a ser asesinadas en Londres. En algunas versiones la película se presenta como una adaptación de The Clue of the New Pin (1923) de Edgar Wallace, tal vez para emparentarse con el krimi alemán. Lo cierto es que la trama tiene un rigor dramático y una coherencia en los hechos que es poco habitual para el giallo. Lo que sumado a la música de Ennio Morricone y a la fotografía de Joe D’Amato da como resultado uno de los mejores exponentes del género. Los asesinatos están resueltos con violentas puñaladas (salvo uno, el de la chica ahogada en la bañera, resuelto con una impresionante cámara en primera persona).