Cuento de ciencia ficción en el que un psicólogo es enviado a una base espacial en problemas en el futuro. A través de los postulados de la ciencia ficción y de un posible contacto extraterrestre, Tarkovsky hace un viaje a la incapacidad del hombre de comprender el universo. La película se convierte en una experiencia fascinante, sin la espectacularidad de los efectos especiales de 2001: A Space Odyssey (1968), pero con el mismo cuidado visual. Los largos planos secuencias toman su sentido con el paso del tiempo. Más que una película de ciencia ficción, el film es una particular historia de fantasmas en la que los recuerdos se materializan, rompen todos los esquemas de racionalización y hacen vanos los esfuerzos de los científicos.