Cuento de terror en el que un hombre de negocios levanta en la carretera de Nevada a un joven que puede ser un asesino serial. Salva juega en el terreno limitado del thriller manipulador, con The Hitcher (1986) como principal referente. De forma tal que la alegoría fantástica queda relegada al duelo actoral y la puesta en escena (tan estilizada como segura) se luce, pero carece de sustento.