Comedia de ciencia ficción en la que una mujer se achica a consecuencia de unos químicos lanzados por una organización que quiere controlar al mundo habiéndolo más pequeño en California. La película parodia descaradamente a The Incredible Shrinking Man (1957). Es una lástima que no profundice la pesadilla de la miniaturización en las secuencias en que la protagonista se enfrenta a los juguetes o al triturador de basura. Lo único atractivo termina siendo el uso colorido de los decorados y del vestuario.