Drama en el que una escritora junta testimonios de las sirvientas negras de un pueblo de Mississippi en la década de 1960. Adaptación de la novela de Kathryn Stockett. Tate Taylor ingresa en la gran industria con un crowd pleaser maniqueo, reaccionario e infantiloide cuyo éxito en la taquilla asegura su estancia en Hollywood. Si intenta evitar la abyección de películas como The Color Purple (1985) o Mississippi Burning (1988) invocando la fotografía luminosa de los melodramas de Douglas Sirk, las potencias de lo falso nunca aparecen, la contradicción no es asumida, los personajes sólo maquetas y la mirada retrospectiva es tan facilista como simplificadora. La película no tiene nada que decir o mostrar porque todo le es ajeno. En el aspecto interpretativo Emma Stone algún gesto imprevisible todavía tiene, las negras agradecidas de la oportunidad y de sus personajes, Bryce Dallas Howard deberá rever con su agente la decisión de interpretar imbéciles y la pobre Sissy Spacek deambula como un zombie. Ah, de la nada aparece la gran Jessica Chastain, pero con otro poco feliz personaje. The Help es una ñoñería propia de Disney y el productor Chris Columbus que lamentablemente todavía tiene un público dispuesto para lavar culpas con el sufrimiento ajeno.
