Comedia de ciencia ficción en el que un actor desaparecido aparece con amnesia en una Los Angeles totalitaria del año 2008. Luego de un debut auspicioso, Richard Kelly se cree capaz de, en una sola película: hacer una sátira política, adaptar la estética del comic y el anime, reinventar la cultura pop, criticar la guerra contra el terrorismo e incluir números musicales. El resultado no podría ser más que caótico, imposible y maldito. El film se regodea su propia incoherencia, delirio y desmesura. Por eso se puede disfrutar. Son muchas las referencias, sensaciones, estilos y géneros, pero el principal problema es que Richard Kelly no sabe cuándo parar. Lo que se impone es la ciudad de Los Angeles, sus playas, ferias, sus fiestas y calles. Ciudad tan caótica como la el film mismo. Richard Kelly infla las ínfulas de autor hasta ver si es un genio o un farsante.