Psycho thriller en el que dos hermanos secuestran jóvenes mujeres para tenerlas encerradas en el sótano de su casa en un pueblo de la costa de California. La película es mucho menos horrorosa de lo que su título y premisa insinúan porque el guión de Don Jones hace un inútil intento de psicologizar a sus personajes y jugar con la misteriosa presencia de la madre en la casa. Pese a estrenarse un año después de Last House on the Left (1972) todavía no incorporó el gran aporte del film de Craven. Lo peor de todo es que la pareja de hermanos cada vez resulta menos amenazante y el clímax carece de impacto y tensión. El film sí tiene un momento efectivo al principio: la llegada de la primera chica al sótano cuando se encuentra con otras dos acostadas.