Film bélico en el que un submarino americano intenta derribar a un buque en las costas japonesas durante la segunda guerra mundial. Uno trata de preguntarse durante todo el film las razones o los motivos que hicieron posible su realización. Con el agradecimiento final al Ministerio de Defensa está todo dicho. Porque los realizadores y los personajes en ningún momento se preguntan qué están haciendo o por qué lo están haciendo. La película es una clara influencia para Crimson Tide (1995), aunque no sea precisamente un mérito (para ninguna de las dos).