Drama criminal en el que un adolescente que idolatra a su hermano mayor se involucra en la violencia callejera de pandillas en Tulsa, Oklahoma. Francis Ford Coppola opta deliberadamente por la metáfora y el simbolismo. Obliga a tomar distancia de algunos pasajes un poco innecesarios de la historia. Pero igualmente transmite el agobio y el encierro de la vida en la ciudad y hace un excelente uso de algunos símbolos (la pecera), de las breves irrupciones del color en la fotografía en blanco y negro y de las asociaciones visuales entre las nubes, el mar y la libertad. La resolución es trágica y esperanzadora a la vez.