Cuento de terror en el que un marinero conoce a una chica que trabaja en una feria que se rumorea puede ser una sirena que asesina a sus amantes en las playas de Venice, Los Angeles. Curtis Harrington retoma la tradición cinematográfica del fantástico vacilante de Jacques Tourneur y Val Newton. Su película está en el mismo vecindario que las producciones de bajo presupuesto de Roger Corman de la época (más allá de que se estrenó en el festival de Cannes gracias al prestigio que tenían los cortometrajes de Harrington), pero se despega por la sugerente atmósfera nocturna de las primeras escenas, por el realismo casi documental de la ambientación en las costas de California, por las misteriosas apariciones de una mujer que le habla a la chica en una extraña lengua y la contenida interpretación de Dennis Hopper.