Docudrama en el que dos jóvenes nigerianos buscan trabajo en Abidjan, Costa de Marfil. Jean Rouch da inicio al cinéma vérité. Los actores se interpretan a sí mismos y la ficcionalización de la realidad es completa. Pero el uso de la voz en off de los protagonistas quita autenticidad a la propuesta. Lo que queda es el erotismo de los cuerpos, el sol que quema y los rituales cotidianos. O el intento de hacer una película imposible. A fin de cuentas el colonialismo se lleva, pretende, finge, aniquila.