Comedia de ciencia ficción en la que un analista de la bolsa de comercio se convierte en un hombre invisible en San Francisco. Carpenter trata de darle al film un aire de Hitchcock (hombre común acusado, pareja en fuga, trama de espionaje), pero se encuentra muy lejos de su territorio. Nada puede hacer con un Chevy Chase como protagonista y con unas escenas diseñadas para el lucimiento de los efectos especiales. Como resultado tenemos el peor film de su carrera.