Western en el que un ex delincuente pierde un tren y vuelve con su banda que planea un robo en Texas. La película es un producto bastante atípico. Si bien arranca con el protagonista tomando un tren, la puesta en escena de Mann esconde mucha información. Luego inicia un viaje que termina con varios personajes como rehenes en un casa. Y termina sí de forma más convencional con el intento de robo a un banco, aunque en un pueblo fantasma que suma rareza. Muchas de los motivos del spaghetti western como la ambigüedad moral, la violencia, los primeros planos agresivos y el sadismo ya estaban presentes en el cine de la década de 1950 con la segunda generación de directores clásicos americanos.