Comedia dramática en la que tres amigos viven obsesionados por las nuevas tecnologías de comunicación (celulares, internet) en Chicago. Desde la cotidianidad y la simpleza, Swanberg reflexiona sobre las relaciones de pareja y la influencia de la tecnología. Más allá de la narración fragmentada, de los arreglos formales de video y de los personajes poco brillantes, el film juega con los límites de la representación, el artificio y las apariencias. Los tres personajes principales son un músico que graba sonidos con la boca y está obsesionado por una chica que sube videos a internet, un joven que vive con su novia y está todo el día con su notebook y un amigo que viene de visita mientras su novia le manda fotos al celular. Resultan modélicos en su patología (carente de riegos físicos y llevada con normalidad), pero que termina afectando las relaciones con los otros. Allí aparece la crueldad, con absoluta sutileza, de no poder decirle la verdad a su amiga, de la novia que se aburre y de la otra que sufre la ausencia. Más allá de la simplista dramaturgia y el discurso algo mecánico, el film es un paso adelante en la obra de Swanberg.