Drama en el que una actriz francesa se entera que su padre es un hombre que su madre conoció estando de viaje en la India y viaja hacia allí. Benoît Jacquot vuelve a reunirse con Isild Le Besco para hacer tratar de hacer otro relato de iniciación a través de su punto de vista. Si bien esta vez el film carece de la vibrante sensación de peligro de À tout de suite (2004), no deja de ser una atractiva variación sobre el mismo esquema más allá de que finalmente deje cierta sensación de incompleto, o de ser apenas un esbozo. Nuevamente con fotografía en video, la película adquiere decididamente un tono documental que desvía el centro dramático del relato cuando la protagonista llega a la India. Anteriormente, un par de detalles también agregaban fugas a la narración. En París la actriz ensaya los diálogos que tuvo con su madre al principio sugiriendo que toda la historia es una construcción propia. Y la misteriosa desaparición del compañero de viaje indio en el avión acercan al terreno del cine fantástico. Los cambios de apariencia de Le Besco(primero como actriz de un film de encargo, después con los atuendos locales durante una boda en la India) acentúan el tono de rareza de la propuesta. Igualmente la sencillez y belleza de la última escena ofrecen un digno cierre a la función.