Drama en el que dos jóvenes se disputan el amor de una chica de espíritu libre en Paris. Si bien Chabrol no ahorra detalles de malicia (las relaciones sentimentales marcadas por la clase), de sátira (las fiestas decadentes con vestidos de toga), de ironía (el motivo de la pelea que origina la venganza) y de grotesco (el happening en el que un artista pinta en la pared a sus modelos), llega un momento que el triángulo se vuelve serio y se extraña la catarsis del crimen.