Drama en el que una joven trabaja como stripper en Le Havre mientras estudia ciencias políticas en Paris. Bruno Rolland mantiene a distancia a su personaje gracias al formato panorámico y la frialdad de la interpretación de Anne Azoulay. Cuando la protagonista empieza un comportamiento errático (se duerme en las clases, un profesor la utiliza para sus bromas, un invitación a una fiesta que sale mal, se pelea con el barman con el que había empezado una relación) nos encontramos ante el miedo de un caso ejemplar.