Policial en el que un delincuente escapa de prisión y busca el dinero del robo que lo incriminó en París. Lelouch se toma su tiempo para presentar al personaje y la situación, incluir un imperceptible salto temporal, hacer unas oportunas inversiones y aprovechar el sentido del humor inherente. Logra introducir el artificio al policial sin sacrificar el realismo o la credibilidad.