Documental sobre la ciudad de Paris y sus habitantes durante el mes de mayo de 1962. Chris Marker utiliza técnicas del cinéma vérité, pero con un acercamiento mucho más espontáneo (se deja llevar al encuentro) e iconoclasta (no sigue una cronología líneal). Al dividir la película en dos partes, aparece la dialéctica. El bienestar social de la primera hace un retrato de los artistas, trabajadores e inventores. Los conflictos irresolubles de la segunda, el racismo, las huelgas, la política.