Quinto y último capítulo de la vida de Antoine Doinel, ahora divorciándose de su esposa, saliendo con una nueva novia y reencontrándose con su primer amor en Paris. La película está construida a partir de flashbacks de los cuatro capítulos anteriores cuya elección es inobjetable, está lo mejor de lo mejor. Sin embargo hay poco para contar, salvo que el protagonista pese al paso de los años no ha cambiado.