Aventura en la que dos ladrones y una periodista se unen a una banda de delincuentes en la frontera de España y Portugal a principios del siglo XX. Como es habitual en Aristarain, los diálogos se lucen. Pero en este caso también el uso de la música y el provecho que saca de los paisajes. La película mezcla tonalidades de comedia y romance, pero el discurso sobre los burgueses y la revolución no logra articularse.