Aventura en la que un publicista hereda un mapa de un tesoro y viaja a Misiones para encontrarlo. Existe un evidente desfasaje entre las ideas que propone el film y la ejecución de esas ideas. Ya en su ópera prima Subiela se muestra demasiado pretensioso para su talento. Entre el personaje de Arturo Puig sencillamente despreciable, una pésima utilización de la música y unos reiterados motivos visuales publicitarios, el film alcanza picos insoportables.