Comedia en la que un dibujante de comics americano viaja a Paris invitado para una retrospectiva de su obra. Resnais no solo logra que los planos se asemejen al cómic (¨Hasta Spielberg puede hacerlo¨, se dice por ahí al pasar), sino que los actores actúen como personajes de comic. Su film dispara dardos a los dos lados del océano: contra los americanos individualistas, chatos, incapaces de hacer un film sobre el amor (“pero sobre violación, sí¨), y contra los franceses que se burlan e idolatran a los artistas americanos y que ¨ocho horas trabajan, 8 horas duermen y 8 horas critican¨. Aunque al final los personajes terminan cansando un poco y los conflictos devienen superfluos. Lo único que deseamos que finalmente el protagonista se vaya a casa.