Drama en el que una familia de emigrantes alemanes se prepara para abandonar la granja en un pueblo de Entre Ríos. A partir de cierta construcción narrativa minimalista, la expresividad del rostro de Brenda Krütli y breves fugas estilísticas que rompen el naturalismo, Schonfeld cierra una ópera prima sobria y sólida. El problema es que los diálogos artificiales y la historia de la madre no encuentran lugar en la trama.