Comedia en la que una adolescente escapa de su casa, queda embarazada y se convierte en modelo en Baltimore. Por primera vez Waters recurre a una estructura narrativa más o menos convencional y utiliza expresivamente en la puesta en escena el vestuario, los decorados y la distancia emocional hacia los personajes. De allí que surge naturalmente la ironía o la autocrítica que refuerzan la verdadera idea de mal gusto y la posibilidad de cometer cualquier atrocidad. En el fondo el film es una fábula sobre la belleza, la fama y la locura, con una brillante imaginería cómica (la auto violación de Divine, el vómito del padre a la hija y los saltos en la cama elástica).