Comedia en la que unos cineastas inexpertos consiguen financiamiento para de hacer una película en Gran Bretaña. El film extrañamente funciona por su mirada crítica a la industria del cine, el aporte de los extravagantes personajes, la oportuna y sutil inclusión de sexo y un par de gags afortunados (la actriz que grita). Aunque en la resolución elige el camino más obvio y menos inspirado.