Policial de ciencia ficción en el que un agente investiga una misteriosa ola de suicidios en Berlín a fines de la década de 1990. Claude Chabrol actualiza el tema del Doctor Mabuse en una coproducción internacional rodada en inglés y una rara incursión suya en el género de ciencia ficción. Más allá de algunos detalles de la ambientación (las pantallas de publicidad que adornan la ciudad, la discoteca que baila a ritmo de una música industrial inhumana) y alguna secuencia inspirada de suspenso, es poco lo que puede hacer con el material disponible. Ya sea por las actuaciones, el doblaje de los actores, los personajes con poco vuelo o las líneas argumentales dispersas, el film carece de la firma distintiva de Chabrol.