Tercera parte de Der Golem (1915) en la que un rabino da vida a un hombre de arcilla para proteger al gueto judío de Praga en el siglo XVI. Adaptación no acreditada de la novela de Gustav Meyrink (1914). Tal vez la versión definitiva de Paul Wegener sobre el mito judío. El expresionismo está dado por el diseño de la ciudad y la secuencia de invocación de un demonio. Los puntos en común con las leyendas de Fausto y Frankenstein son atractivos porque esos relatos todavía no tenían adaptaciones cinematográficas de estas magnitudes.