Comedia romántica en la que una diseñadora de modas alemana conoce a un veterinario de peces en Japón. Dörrie continúa con sus excursiones a Japón, relaciones de pareja y colorida puesta en escena con un alarmante grado de superficialidad. En este caso hace una adaptación libre de un cuento de los hermanos Grimm, agrega unos peces que hablan como narradores en off y una banda sonora de rock indie. Ya el problema no es el retrato de personajes, la banalidad de los temas o la previsibilidad de la historia porque pretendidamente son así, sino a qué espectador quiere dirigirse. Parece que sus orígenes televisivos siguen presentes. Da la impresión que cuando más esteticista y artificial quiere ser peor le sale, Nobody Loves Me (1994), Nack (2002). Y cuando se relaja y deja los adornos de lado, el resultado queda más acorde a su talento, ¿Bin ich schön? (1998) y Erleuchtung garantiert (1999). Una película que se preocupa tanto por agradar y limitarse pierde todo encanto.