Aventura de fantasía en el que un joven arquero hace un viaje por una tierra mítica repleta de monstruos en una época pasada imprecisa. El film es uno de los productos más psicotrónicos y psicodélicos de Fulci donde se juntan unos ridículos hombres lobo, una villana desnuda, escenas de sexo con víboras y unos zombis salidos del pantano. La composición del cuadro atenta contra todas las convenciones y las reglas de ortodoxia. Las imágenes oscuras están repletas de extraños colores, contraluces y reflejos del sol.