Secuela de Batman (1989) en la que el superhéroe se enfrenta al Pingüino y a Gatubela en Ciudad Gótica durante la Navidad. Burton potencia al máximo los villanos: el Pingüino, de una monstruosidad y humanidad impensada, y Gatubela, con una sexualidad y torpeza a partes iguales. Por lo demás, la espectacularidad del diseño de producción y de las secuencias de acción, la ironía y el sentido del humor (el diario que titula “Batman Blows It”) y el toque macabro en la escena sobre el final en la que Gatubela no muestra la cara son los esperables en una producción con el sello de Tim Burton.